Tal como se temía, los recursos para enfrentar la emergencia por déficit hídrico tendrán una disminución. Sin embargo, las autoridades insisten en que seguirán apelando a la gran demanda del secano para conseguir recursos nuevos próximamente. Pese a que en la pasada reunión del Comité Operativo de Emergencia INDAP había anunciado más de 1800 millones de pesos aprobados para bonos agropecuarios y de obras menores de riego, el mandato de Hacienda del 19 de marzo para disminuir gastos para la reconstrucción de la zona afectada por el terremoto provocó que la institución tuviera que disminuir el monto a entregar.
Durante la reunión del Comité Operativo de emergencia se dio a conocer la crítica situación de sistemas de agua potable rural de la región que no tienen otra solución más que la recarga de las napas con aguas lluvias que se produzcan durante este invierno. Asimismo se recalcó que los embalses están en un nivel deficitario de llenado, pero que su nivel actual asegura la temporada de riego.
La gravedad de la escasez hídrica que afecta al secano de la región y en forma intensa a las comunas de Combarbalá, Punitaqui y Canela, fue ratificada por el Presidente de la Asociación Comunal de Crianceros de Combarbalá y Vicepresidente de la Asociación Provincial de Crianceros del Limarí, Jorge Muñoz quien compara la sequía con el mal de Chagas: “es un cáncer silencioso que avanza día a día, que a larga va a terminar quitándome la vida y que no tiene cura. Los dirigentes hemos venido planteando esta situación hace años, que se haga ciertas obras como retenciones de aguas lluvias porque el 97% del agua se va al mar entonces eso debemos trabajarlo desde ahora o nos vamos a transformar en un desierto”.
El Seremi de Agricultura, Marcelo Chacana explicó que “hay un déficit enorme porque de los mismos recursos de INDAP hubo una reprogramación para tener dinero para bonos agrícolas y posteriormente, ya que está en tramitación, tener fondos para bonos de obras menores de riego; se espera que antes del segundo semestre estén recuperados los recursos”.
Con respecto a una petición de la Asociación de Municipios Rurales para que Aguas del Valle aplique una tarifa diferenciada a los municipios para llenado de camiones aljibes, el Seremi dijo que “el Intendente personalmente se hará cargo del tema, pero ahora sólo depende de la buena voluntad y ver como aplicamos la Responsabilidad Social Empresarial y eso depende de un particular. Esperemos que tengan buena acogida las gestiones del Intendente”.
Finalmente se acordó que los 300 millones de pesos que INDAP tiene en caja serán entregados en bonos de hasta 150 mil pesos a los agricultores, apicultores y crianceros más necesitados. El bono deberá ser destinado a la alimentación de animales, insumos agrícolas y veterinarios.
En tanto, la Dirección de Obras Hidráulicas solicitó al Intendente que efectué una petición de Declaración de Emergencia ante el MOP para los Sistemas de Agua Potable Rural con mayores problemas lo que permitiría gestionar recursos para algunas reparaciones.
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